Tiene propiedades antibióticas, anestésicas, cicatrizantes, de regeneración de tejidos, antiinflamatorias, es parecido como coadyudante del tratamiento de afecciones respiratorias, de la boca y de los ojos.
Su acción puede ser definida como "BIOMODULADOR", capaz de llevar los parámetros del funcionamiento orgánico (tensión arterial, metabolismo basal, producción hormonal, etc.) a sus niveles idóneos.
En caso de enfermedad y siempre junto al diagnóstico médico,
el propóleo es muy eficaz tanto en la farmacopea como en cosmética.
Una ventaja a tener en cuenta es la de no producir efectos secundarios
(a diferencia de los antibióticos no naturales) permitiendo una
eliminación natural, sin alterar la flora intestinal ni el funcionamiento
hepático.